Quién es este fulano
Te cuento.
Me llamo Marcos.
Soy un tipo que piensa que todo lo que has hecho en la vida suma para crear la persona en la que te conviertes.
Te lo detallo más abajo pero se resumiría en frases como: la práctica hace al maestro.
He dicho como porque yo no soy ningún maestro, la verdad.
Aunque después de leer esto puede que aprendas algo importante,
por eso te recomiendo que leas hasta el final…
…pero tú haz lo que te pida el body.
Verás.
Yo no empecé a estudiar cuando pude. Cuando podía estudiar no sabía qué quería estudiar.
Lo único que sabía era que tener 18 años y dinero en la cartera molaba.
Molaba mucho.
Llega la vida y te da un bofetón para ponerte en tu sitio.
Ahora te apetece hacer algo con tu mediocre vida. Pues ahora te lo tienes que currar crack.
Después de una dura jornada de trabajo no mola ponerse a hincar los codos*.
*Hay que tenerlos cuadrados para hacer eso, también te digo.
Creo que es la lección más importante que me ha enseñado mi padre.
Un tío que con dos hijos en casa,
un trabajo y muy poco tiempo libre
se puso a estudiar con 30 años…
…con 30 años hace 20 años, no con 30 años de ahora.
Porque para él, ir a la universidad era lo más.
Y eso para mí era tener al puto Arnold Schwarzenegger en casa.
La definición de: tenerlos bien puestos.
Más tarde se me debió de pegar la tontería por estudiar.
Porque si no,
no me explico como cogí los bártulos,
mis escasos 1000 euros de ahorros
y me piré a Alemania
a estudiar y trabajar.
Sabiendo decir: póngame una cerveza.
De coña.
Esas son las acciones que forjan a una persona. Al menos son las que me forjaron a mí.
Pero llega este tío, y se mete a currar a una de las empresas más potentes de toda Alemania.
¿Sabes cómo lo hice?
Vendiéndome.
Porque la mayoría tiran la toalla cuando leen una oferta de trabajo y ya piensan que no encajan porque no tienen un C1 de inglés o 3 años de experiencia.
Tatúate esto…
Eres (insertar palabra malsonante aquí) ________ si no luchas por un puesto de trabajo si piensas que lo que aportas a la empresa es mucho mayor que cualquiera de esos requisitos.
Absurdo.
Pero claro, hay que vendérselo al que ha puesto la oferta. Y vivimos en la época de «echar currículums» a granel. No de investigar cada empresa con lupa para saber si de verdad hacemos buena dupla con esa empresa.
Lo hacemos por lo obvio, que es llevar dinero a casa a final de mes.
Y la verdad, a casi nadie le gusta vender. Es más, hay muy pocas personas no se les revuelve el estómago de sólo pensar en tener que vender algo.
De hecho, yo mismo lo odiaba. Cuando estaba de comercial me he ido a casa llorando tantos días que ahora cuando lloro sólo segrego una especie de polvo cristalino.
Aunque uno se curte de las hostias que se pega, no de los éxitos.
Los éxitos son la recompensa por equivocarnos menos veces.
Por eso puedo decirte con la boca bien grande, que si necesitas ayuda para vender, puede que sea tu as en la manga.
Ojo: La parte en la que te quiero vender algo empieza aquí.
Si no te gusta, no sigas leyendo.
Te avisé porque: el que avisa no es traidor.
Mira, yo no quiero ser tu media naranja si los dos no encontramos esa chispa.
Y vayamos con la honestidad por delante para no perder nuestros activos más valiosos.
- Tu tiempo.
- Y el mío.
Puede darse el caso de que tu proyecto se me quede grande.
¿Y qué voy a hacer? ¿Perder tiempo en darte excusas de mierda?
Como eres una persona de mundo sé que valorarás más un NO a tiempo que una disculpa demasiado tarde.
Y tampoco es que yo sea alguien especial.
Mi único aval es mi informe de la vida laboral.
No sé lo que es irse al Caribe para celebrar que hice lo que tenía que hacer.
Pero sé lo que es trabajar de 8:00 a 22:00 para poder ser «de la clase media«.
De picar hielo en una nevera industrial, a buscarse la vida en Alemania y más tarde volver a España para venderle coches a alemanes…
…en realidad volví por el buen tiempo y las terrazas bajo el calor del Sol.
Y después de muchos años de currar para otros, he decidido que me lo quiero montar por mi cuenta.
Chimpum.
Lo siento si esperabas la típica historia de arruinado y redefinido como el ave fénix. Aunque así fuese, no sería una bonita historia.
Pero no me olvido de lo que se siente en una nevera industrial.
Y eso es lo que me empuja a intentar que este proyecto salga adelante.
Por eso no tengo tiempo que perder en excusas baratas ni en proyectos sin una visión clara.
Un trabajo entre dos cracks es tan bueno como la confianza que tiene el uno del otro.
También te digo, si eres como yo y necesitas tener confianza con alguien para poder trabajar con esa persona, aquí debajo puedes apuntarte a mi lista de emails.
Es un 2×1 de manual.
- Aprenderás cosas que te servirán en tu proyecto.
- Y me conocerás un poco más en cada email.
¿Y qué me llevo yo?
Yo me llevo la posibilidad de poder ofrecerte mis servicios en los emails. Si los quieres o no, es cosa tuya.
Si aceptas esa condición, lo que te llevas tiene un valor enorme.
Te doy mi palabra.
Te mando una píldora en cada email que puedes aplicar directamente a tu negocio o a tu vida o no aplicarlo. Tienes todo mi conocimiento concentrado en los emails.
Qué hacer con él, está en tus manos.
Si no me crees, para muestra un botón.